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San Leroy Merlín

Si vuestra merced es curioso, no busque en el santoral las bondades de este Santo que -aunque muy piadoso y milagrero- no encontrará por ahora mención alguna, aunque en breve, será canonizado de facto por autoridades religiosas, civiles y militares. A partir de ese momento, este humilde vasallo de la Villa de Aljaraque promete que, su buen hacer, se verá recompensado por múltiples noticias en prensa y radio -incluso con campañas de temporada- donde la Santa Hermandad de San Leroy, propietaria de los derechos de tan excelso patrón, nos deleitará con elaboradísimas obras que nos consolarán en nuestro quehacer diario, haciéndonos mucho más agradable esta vida -transitoria- que obligatoriamente hemos de penar en la tierra, por culpa de los pecados originales de nuestros antepasados.
Tiene su sede tan augusto y magnífico Santo, esperamos que nuevo Patrón en breve, en el municipio de Nuevo Corrales -que no en el de Corrales, que ese era un antiguo pueblo minero que murió en el año de Nuestro Señor de 2002-. Su basílica, de porte catedralicio y ciertamente modernista es la más grande de la provincia. Está situada tras la pequeña, aunque maravillosa iglesia de Nuestra Señora Reina del Mundo. Si vuestra merced viene de la villa de Onuba por el famoso puente de Punta -conocido por sus controversias y luchas políticas-, verá la catedral asomar por la izquierda, por la derecha y por encima de la mencionada iglesia, de tal manera que el campanario de la misma, a fuer de algún milagro de San Leroy o de sus correligionarios, asoma por encima de la catedral y cuando tañen las campanas de la iglesia, parece, ¡oh, milagro!, que lo hacen en la catedral, dado que los badajos se mueven justo en el centro del luminoso letrero que nos anuncia su existencia.
Sugiero, humildemente, a D. Juan Manuel Orta, Señor de estas tierras, quien manifestó en el último Concejo que estaba orgulloso de la nueva catedral y a quien Dios mantenga muchos años en tan provechosa circunstancia, que, aunque él se sienta orgulloso de ver desde el puente los letreros luminosos que anuncian a la nueva santidad, consienta en retirarlos, dado que nos, pensamos, que el Santo no necesita de tales artilugios para demostrar su valía y que su nombre de por sí, ha traspasado ya las fronteras de nuestro reino y que dicha propaganda, sólo hace desmerecer la valía del mismo y también de paso, la de los Santos de la iglesia de Nuestra Señora Reina del Mundo, que se sienten apabullados ante tanta propaganda ajena. Propaganda, a la que no estamos acostumbrados los que por aquí hollamos estas tierras ni, si me permite, necesitamos. Sabemos que está en mano de tan grande Señor y por ello, así, humildemente lo pedimos.
También deseamos que el día de apertura de la nueva Catedral de San Leroy, sea instituido en nuestro municipio como fiesta oficial y si... ello no fuera mucho pedir, solicitamos se saque al nuevo Santo Patrono a hombros de los concejales del equipo de gobierno de este Concejo por todas las calles de Nuevo Corrales. Por aportar ideas, que es la única intención de este humilde vasallo y, sólo buscando la mayor gloria del nuevo Santo, se podría poner sobre una plataforma de madera rectangular, a la que se le colocarían unas andas, una hormigonera de color butano, varias escaleras de aluminio, un cortacésped pequeño no importa el color, algunas lámparas de diversos tonos y varios listones de madera de tamaños varios, todo ello aderezado ornamentalmente con latas de pinturas de marcas reconocidas y tornillería al gusto. De las partes más altas de la figura que nos quedara, se colgarán amarradas por cuerdas de tonos lilas, brochas por estrenar del tamaño del 1 al 7. Creo que así, se conseguiría una figura acorde con las expectativas de la Hermandad y también con las del equipo de gobierno del Concejo, verdaderos devotos del nuevo Patrón.
También aprovecho ésta, para pedir que se solicite al Obispado de la villa de Onuba, que el nuevo Santo se ubique en la gasolinera que está en la misma carretera, de forma que no se sabe si en medio de la carretera hay una gasolinera o, por el contrario, es la carretera la que pasa por el centro de la estación de servicio, pero en fin, estas son cosas que este humilde servidor no entiende y que deja al mayor arbitrio del muy magnífico Señor Orta, legítimo Señor de éstas, sus tierras.
Si San Leroy se ubica en la gasolinera, los usuarios de la misma, mientras consumimos, podemos rezarle un rápido padrenuestro que nos alivie los muchos pecados que nos mortifican.
Y este humilde servidor de tan gran Señor, no encontrando otra forma de despedirse y esperando ser perdonado de su mucha ignorancia, lo hace citando a un tal Quevedo que en El chitón de las Tarabillas se despedía de esta guisa: "Guarde Dios a vuestra Señoría de sí mismo y a todos de vuestra merced, para que vuestra Excelencia y todos estén guardados de lo peor".