Camilo Gómez Cruz (2016)
Muchas personas tienen un concepto equívoco de lo que es la amistad. Decía sobre la tal cosa el cordobés Séneca: "No hay amistad más que en la gente de bien." Y el dublinés Oscar Wilde: "Sí, el amor está muy bien, a su modo, pero la amistad es una cosa mucho más alta. Realmente nada hay en el mundo más noble y raro que una amistad verdadera."
Alguno puede tacharme de lo que le dé la gana, pero yo siento orgullo de ser amigo y reconocerme como tal, en él, en ese hombre sencillo, patriarcal, cabal sin fisuras que es Camilo Gómez Cruz.
Mi amigo Camilo, el incansable luchador, el descontento, el alienado si quieren, ese que ha defendido contra viento y marea este cacho de tierra llamada Huelva y que la ha llevado por bandera en donde quiera que ha estado; ese lugar no reivindicado como excelso las más de las veces por los obligados a ello y que sin embargo forma parte de su idiosincrasia, de la epidermis de su ya enjuto cuerpo: marismas, esteros, salinas, playas, cotos, sierras, romerías, fandangos, guitarras, son, tronío, palmas, volantes, arenas, pinares, compás, tamboriles, aguardientes, barras, nudillos, cantes en la intimidad o "soníos" negros..., mi amigo Camilo, decía, que no se ha dejado nada atrás, que se lo ha comido todo -como debe ser, dicho sea al paso-, presentará su último libro Orígenes, evolución y vivencias del arte flamenco el próximo lunes en el Gran Teatro de Huelva.
En el prólogo del libro "Fosforito" dice de él: "Necesitamos muchos Camilos, hombres íntegros, con las ideas claras, que sepan entender la pureza de los conceptos." Y esto debiera hacernos reflexionar, meditar un poco y desterrar absurdos clichés enquistados no sabemos bien por qué, en el imaginario común de esta provincia, de que todo aquello que viene de fuera, del exterior, es mejor que lo producido en casa, lo autóctono. Craso error.
De maestro de ceremonias actuará quien firma esta columna y de presentador del escritor un genio, Arcángel: el mejor cantaor que ha dado Huelva en su historia, en palabras del propio Camilo Gómez Cruz.
El libro contiene 253 fotografías -las he contado- de artistas procedentes del baile, de la guitarra, del son y del cante flamenco, muchas de ellas de propiedad del autor y por tanto inéditas, y por sus páginas transitan más de medio millar de artistas del flamenco.
Ya sabe, el próximo lunes 30 de mayo, a las 20:00 horas, Huelva tiene una cita consigo misma y con su historia en el Gran Teatro.