Donde habita el olvido
¿Qué nombre tiene aquella enfermedad que nunca recuerdo? Así trata Maragall (en el nuevo El País con acento en la i), ex alcalde de Barcelona y ex presidente de la Generalitat de Cataluña, a la enfermedad que le han diagnosticado y a la que entregará toda su fuerza y futuro. Y a mí me entran ganas de llorar porque cuando mi abuela fue diagnosticada ninguno entendíamos por qué se cagaba encima .Y mi madre lloraba y le ponía polvos de talco en su cuerpo de abuela y bebé. A mi abuela se le olvidó vivir tras el último latido. Las cortezas de su cerebro se hicieron blandas e inútiles y a veces la sentía como un bebé vagabundo, hasta que se olvidó de respirar después de la última respiración. Y sé que mi abuela murió de olvido pero no olvidada. Y sé que sus huesos se plegaron en posición fetal, como un recién nacido famélico y listo para morir. Pasqual: Aun puedo librarme de esa enfermedad de cuyo nombre no quiero acordarme. Gracias y suerte.
(Publicado el 22 de octubre en Odiel Información)
Desgraciadamente, tu artículo resulta brutal, tan duro y áspero como la misma vida.
Un abrazo.