Usted está aquí: Inicio / Pedro Gabo / Blog / Comunitario, por Pedro Gabo

Comunitario, por Pedro Gabo

¡Qué lejanas ya las pasas elecciones europeas! Y sólo han pasado doce días de aquellos como mi sí ninguno. Pero al parecer somos muy comunitarios y esto es muy bueno. Que la oportunidad de participar de un modo activo haya sido nula, al parecer no importa. Por asombroso que a veces pueda parecer (en este mundo de plebiscitos), pervive un sentido de lo comunitario entre personas y colectivos que aún siguen soñando con la transformación social. Mucho más interesante, y necesario, que estas elecciones europeas tan tristonas.

Y no solo sueñan. Hay una experiencia comunitaria, participativa, en Huelva, que tal vez como fruto de su propio rigor y progresivo enraizamiento, esté pasando por la vida municipal con mucha discreción. Y constancia. El Plan Integral de Distrito V, se está convirtiendo en un ejemplo de cómo construir en Huelva, en sus barrios, de cómo crecer colectivamente. Sin tanto desánimo. En todo este proceso ha tenido un papel decisivo Valdocco (con el apoyo indudable del Observatorio Local del Empleo y de mucho trabajador municipal), que frente a esa tendencia a encerrarse sobre sí misma a la que al parecer tienden tantas de las denominadas ONG, han apostado por salir al mundo, con ganas de implicar y de implicarse, de construir un proyecto colectivo. Ideándolo y poniéndolo en marcha, de la mano, con mucha gente. Y empieza a tener el aval del tiempo frente a la falsa apatía de Huelva. Entre todos mantienen viva la ilusión y el trabajo. Agua lleva.
El Ayuntamiento se ha quedado fuera de juego al no apoyar incondicionalmente una iniciativa que es única en materia de participación ciudadana. No porque no haya otras importantes, sino por el sentido comunitario. La sombra de Adame-Midas es alargada.
En defensa de lo que a todas luces es un trabajo serio y bien hecho, es necesario poner las cosas en su sitio y dejar de hablar de movimiento vecinal en Huelva. Sobre todo, por lo de movimiento. Aquí lo que hay es mucha gente que habla y que a veces mejor debería callarse. No hay color. Una cosa es defender la participación y otra aceptar que cualquiera se crea que su bendita opinión es sagrada por ser presidente (o presidenta) de tal o cual entidad. No estaría de más que desde lo vecinal se tomara ejemplo y empezaran a defender modelos de desarrollo comunitario (o local) como el del Distrito V. Un respeto.
*
La participación que hay que defender es la que nos proporciona más derechos ciudadanos. La que apuesta por la promoción social y no, por ejemplo, por un policía por persona si el presupuesto lo permitiera.
Me parece que hacer una parada para reflexionar dónde se está para saber a dónde se quiere ir, como ha hecho ahora el Comité director del Plan, no es comparable a esa manida Carta ciudadana que lleva dadas más vueltas que la falsa monea. La Federación de Asociaciones de Vecinos periódicamente la saca como señuelo para justificar una ausencia total de proyecto comunitario o local. Falta nos hace y debería de estar abanderando por quienes se postulan como representantes de la ciudadanía onubense. O dejar que trabajen otros.