Tanto café no sienta bien
Los socialistas no dan una a la hora de tomarse un café. Primero, a Zapatero (que lleva bien las cuentas de la conversión de las pesetas al euro) le cobran ochenta céntimos en el bareto al lado de la Moncloa, y después viene Solbes (que no controla la conversión de pesetas a euros) y se toma un café con Zapatero, se gasta dos euros y deja ¡un euro! de propina. Claro, así cómo queremos que vaya el país... ¡Inflacción! y a dejar el vicio de coleccionar casas, que en América se les cayó el chiringuito por vender casas a indigentes. Y mi padre que es pensionista y socialista me dice: "Pues no se equivocaba ZP; en el hogar del pensionista el café me cuesta sesenta y cinco céntimos". Y yo digo: "Pues en el Brisamar a mí sólo me cuesta uno cincuenta el desayuno entero. Y no dejo propina"... ¿No será que los españoles, además de no valorar el euro, no hemos aprendido controlar los gastos? Menos números y más contención, señor Solbes...
(Publicado en Odiel Información el 17 de diciembre)
Inflación.