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Las matemáticas de mi hija

Yo tenía pensado hablar del SIDA. Yo quería hablar de la forma en que le hemos perdido el miedo a la más perversa forma de castigar al sexo, esa maravillosa manera de vivir. Yo quería hablar del 30% que desconoce que lleva los anticuerpos en su sangre. La semana pasada sufrí algo que denominaron "síncope". Mi familia pensó que me estaba muriendo. Un chequeo exaustivo en dos hospitales acabaron diagnosticándome una salud excepcional. Sin anticuerpos, entre otras enfermedades que no han invadido mi cuerpo. Y para mí, como para usted, lector, saber que no tiene anticuerpos es una especie de principio con buena letra ("tiro que libro"). No se escandalice; seguro que ha sufrido el pellizco previo al resultado de los análisis... Dejémonos de dobles morales, ¿quien se hace una analítica y espera el resultado sin un pellizco de pavor? Esta sociedad nuestra es inconsciente o pacata. ¿Quién deja su sangre para evaluar a qué sociedad pertenece?...


(Publicado en Odiel Información el 3 de diciembre)


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Jose Luis Piquero
Jose Luis Piquero dice:
04/12/2007 00:53

Muy bueno, pero no he entendido el título... No ve las matemáticas ni a tu hija. ¿Estaré perdiendo percepción poética?

gordons
gordons dice:
04/12/2007 21:55

Hostia qué risa, es verdad!!
No le cambiéis el título que así mola más!

evavaz
evavaz dice:
04/12/2007 22:15

Es que la columna la iba a escribir sobre los problemas de matemáticas que le mandaban a Eva. Que si una clase iba de excursión a Isla Mágica, y 18 se tomaban un helado y los otros un bocadillo: ¿cuántos se comieron el bocadillo? u otro: de mil y pico socios del Recreativo, no sé cuantos se han borrado. En fin, el angelito está en tercero, y, por ahora, sabe responder. No quiero imaginarme cuando empiece con ecuaciones y el Recreativo y las excursiones. Vaya, que en mi época, los problemas de matemáticas eran mucho más aburridos. Eso sí, este angelito mío tiene problemas con la resta. Yo creo que es por su carácter: sólo sabe sumar y multiplicar, restar y dividir no. Como siempre, el mundo enseña hasta lo que no se conoce.
El caso es que iba a hablar de las diferencias abismales que veo en su educación escolar y, de repente me puse a hablar del SIDA. Le dejé el título por puro gusto de la digresión. No fue causa del cannabis. Es que me molaba la desconexión.
He de entrar más amenudo, el problema es que me río más entrando en blogs ajenos y como hay tantos...

txe
txe dice:
05/12/2007 18:29

buf, y que lo diga. Yo pasé por ese trago hace poco, también con buen resultado, pero que malos ratos esperando. Anyway, el Sida ya no es la plaga destructora de antaño, dicen, se puede llevar una vida normal y longeva -dentro de lo que cabe- como si de otra enfermedad crónica se tratara. O al menos eso me han hecho entender.

besos.

gordons
gordons dice:
07/12/2007 19:47

Hombre, Txe, tú por aquí!
Soy Quejica Ad Hominem, me gustó tu reacción a lo de Supermodelo.
Estoy con Eva, entrar en blogs ajenos es lo más divertido.