Personas (2017)
Dos grados bajo cero. Madrid despierta el 31 de diciembre de 2016. Bajo un soportal, un carro de la compra de una cadena de supermercados cargado con bolsas variopintas de objetos que no identifico, pero imagino puedan ser ropa vieja y sucia, y quizás raída, extraída de los contenedores de basura.
Junto al carro, su propietario; un hombre de edad indefinible, con manos, uñas, rostro y pelos greñudos; tiznado y negro, que mira con ojos ausentes más allá de las personas, de los objetos y de todo cuanto le rodea.
Me paro, extraigo un billete (yo, tampoco dado a la beneficencia y defensor de la igualdad de derechos y oportunidades para todos) y se lo tiendo.
El hombre ausente sale de su soñolencia, me mira a los ojos, fijamente, como calibrando la intención con que hago la tal cosa, orgulloso de sí, de ser una persona a la que no se insulta ni se le menosprecia en su consentida o no soledad. Como al medio minuto, sin dejar de observarme, auscultando el por qué de mi acción, mueve un poco la cabeza, asintiendo, le devuelvo el gesto y me marcho.
Paco Huelva
31 de diciembre de 2016