Resumen de actividades
Abril es el mes más cruel... porque cae el Día del Libro. Yo no sé si Eliot lo decía por eso. Es broma, ya sé que no. Pero es para suscribirlo.
Ayer Eva leyó con Pablo García Baena en el Museo Provincial de Huelva. Permitidme la vacilada de citar a la figura. Pero nos pasamos el mejor rato charlando con Violeta C. Rangel, perdón, con Manolo Moya (qué gracia tiene el tío) y María Gómez y un poeta-profesor que era calcadito a Góngora. Manolo se despidió de él diciéndole: "Pues nada, cuando lo termines mándame "La Galatea" y ya te escribiré dándote mi opinión...".
Exposición sobre JRJ. Destacaban frases como "Yo quería dar a España, en mi persona, un poeta universal", "Yo he sido un gran modernista, un gran simbolista; claro, yo inventé el modernismo, el simbolismo...", "Cuando llegué a Madrid, me llamaron el Gran Poeta, publicaron mi retrato...". No sé si soporto menos al poeta cursilón y relamido de las violetas, al engolado poeta metafísico coñazo de "Dios deseado y deseante" o a la propia persona antipática, neurótica, hipocondríaca... Qué tío tan esdrújulo, cargante, ególatra y abusón. Soy un juanramoniano entregado.
Mañana tenemos algo así como una comida campestre y luego yo leo mis poemas en la Casa de Cultura de Calañas. Ya conozco el público, porque Eva leyó allí el año pasado. Es un público que un poeta desea. A veces diez lectores entregados en un pueblo pequeño valen más que una sala llena en Barcelona.
Y para rematar, nos vamos a Asturias. Si en días venideros de whisky y rosas no apruebo comentarios en el blog, que sepáis que no es censura sino distancia. Pero hasta el lunes aprobaré todo, incansablemente.
(Recuerdos a Myriam, a Judith y a Ana R. L., profesauria ella. Al resto quizá os vea pronto).
Ayer Eva leyó con Pablo García Baena en el Museo Provincial de Huelva. Permitidme la vacilada de citar a la figura. Pero nos pasamos el mejor rato charlando con Violeta C. Rangel, perdón, con Manolo Moya (qué gracia tiene el tío) y María Gómez y un poeta-profesor que era calcadito a Góngora. Manolo se despidió de él diciéndole: "Pues nada, cuando lo termines mándame "La Galatea" y ya te escribiré dándote mi opinión...".
Exposición sobre JRJ. Destacaban frases como "Yo quería dar a España, en mi persona, un poeta universal", "Yo he sido un gran modernista, un gran simbolista; claro, yo inventé el modernismo, el simbolismo...", "Cuando llegué a Madrid, me llamaron el Gran Poeta, publicaron mi retrato...". No sé si soporto menos al poeta cursilón y relamido de las violetas, al engolado poeta metafísico coñazo de "Dios deseado y deseante" o a la propia persona antipática, neurótica, hipocondríaca... Qué tío tan esdrújulo, cargante, ególatra y abusón. Soy un juanramoniano entregado.
Mañana tenemos algo así como una comida campestre y luego yo leo mis poemas en la Casa de Cultura de Calañas. Ya conozco el público, porque Eva leyó allí el año pasado. Es un público que un poeta desea. A veces diez lectores entregados en un pueblo pequeño valen más que una sala llena en Barcelona.
Y para rematar, nos vamos a Asturias. Si en días venideros de whisky y rosas no apruebo comentarios en el blog, que sepáis que no es censura sino distancia. Pero hasta el lunes aprobaré todo, incansablemente.
(Recuerdos a Myriam, a Judith y a Ana R. L., profesauria ella. Al resto quizá os vea pronto).
piquero,
celebro que todo vaya bien. Hace unos días te mandé un email al blog pero no tengo claro que te haya llegado.
En fin, abrazos y mucha salud. Esperaba antes encontrarte en en un bar o un Alsa que en una pantalla Siemens. Pero así van las cosas en este mundo, y que siga.
fg