Hasta hace medio año yo ignoraba el nombre de Erskine Caldwell (1903-1987), uno de los grandes escritores norteamericanos del siglo XX, cuyas obras, sin embargo, resultaban difíciles de conseguir en España. Últimamente, la editorial Navona ha ido editando en rápida sucesión varias de sus novelas y para mí ha sido un deslumbramiento.
El camino del tabaco, La parcela de Dios y
Tumulto en julio tienen un escenario y unos personajes comunes: el sur paupérrimo de los años de la Depresión, con sus jornaleros empobrecidos y primitivos, racistas e ignorantes, cuya vida se les escapa de las manos y sólo son capaces, en último extremo, de reaccionar con ciega violencia.
Creo que los mejores diálogos que haya leído en la narrativa norteamericana están en estas novelas llenas de erotismo, de miseria y de odio, retratos de un mundo quizá no muy distante del actual. Las traducciones (de Horacio Vázquez Rial, Vicente Campos y Carlos Mayor, respectivamente), impecables. Os recomiendo encarecidamente leer a Erskine Caldwell. Droga dura.
Habrá que pincharse. ¡Qué remedio!
UN ABRAZO.