Elegante desprecio

El facherío está indignado con los estudiantes premiados que le negaron el saludo al ministro Wert. Les llaman maleducados, asilvestrados y esas cosas, y alguno más tonto hasta ha rebuznado: "Que devuelvan el premio".

En primer lugar, el premio es suyo. No se lo ha dado el sr. Wert. Se lo han ganado ellos.

En segundo lugar, no es mala educación. Es una forma de protesta contra los recortes abusivos e intolerables. Esa forma de protesta se llama desprecio. No contra la persona del sr. Wert sino contra lo que representa y contra lo que ha hecho en el ejercicio de su cargo. Y el desprecio no es violento. ¿Han agredido al ministro, le han insultado siquiera?

Lo que disfrutaba la derechona cuando le hacían una escena así a algún ministro socialista. Diferentes varas de medir. Por eso me he reído mucho cuando en "El Intermedio" han recordado el momento en que Rodrigo Rato le niega ostentosamente el saludo al entonces vicepresidente del Mercado de Valores, Luis Ramallo, que estaba acusado de corrupción. Ramallo fue posteriormente exculpado, mientras que ahora Rato... Ya sabéis: Bankia y demás. ¿Dijo algo entonces el facherío? ¿Acusaron de maleducado a Rato? No: ni rebuznaron, contrariando su naturaleza.

Así que uno mi aplauso a los que el público les dedicó a esos estudiantes: por sus méritos y por su valor y por su compromiso. Y el ministro, que se trague la píldora en el Congreso con un cubata a bajo precio.

Ups... Ya no.