El monstruo y los otros
Pero los monstruos no nacen de la nada. El mundo civilizado se relame con las peripecias atroces de este caníbal africano sin acordarse de quién le puso en el cargo que ocupó: Gran Bretaña, los Estados Unidos, Israel... Los mismos que más adelante tuvieron buenas ocasiones para lamentarlo. No me detendré en los detalles históricos, que cualquiera puede husmear por internet. La lista de los que occidente llama monstruos está llena de personajes creados y alimentados por las potencias europeas y Norteamérica, verdaderos expertos en cerrar los ojos ante cualquier desmán si quienes lo sufren son unos negritos. Hasta que les llega el turno a sus ciudadanos y a sus empresas o, simplemente, deja de convenirles el que antes era más que aceptable. Saddam Hussein sería otro buen ejemplo, y hay docenas.
Lo mejor de "El último rey de Escocia" es lo que no se ve, lo que no se cuenta, todo aquello sobre lo que la película pasa de puntillas. Me quedo con la interpretación del gran Forest Whitaker. El resto, mejor buscarlo en la Historia y que cada uno saque sus conclusiones.
Me ha gustado leer este comentario. Me disgusta saber que el mundo civilizado alimenta al mundo de los monstruos. Estos días he leído cosas sobre el juicio a los sobrevivientes del régimen de Pol Pot. Aquel lindo muchacho responsable directa e indirectamente de la muerte de cerca de dos millones de personas. Me gusta que se recuerde las atrocidades cometidas en nuestra historia. Me disgusta que tengamos estos recuerdos.
Comentarios aparte, me he perdido esa película. La añadiré a la lista de pendientes.