"Canción desafinada": Un poema de Adolfo Cueto
la soledad, ¿por qué
los has abandonado?
Sueño huido, jeringuillas oxidadas, muertas vías
de trenes sólo de ida,
¿dónde te has escondido?
Noche suicida, noche alargada de las ambulancias,
negras lágrimas, ácidas
botellas a escondidas.
Cuerpos lamidos sólo por aceras, sombras que dan
tumbos de bar en bar
con el hombro escupido.
Toda esta infancia adulta, alas en cárceles y hospitales,
ángeles de arrabales,
hijos de la distancia.
Y esta orfandad de sanatorio -y esquina y callejones-
de quien no tiene nombre
y no tuvo lugar.
Ciegos faros sin puerto, carne de la desolación,
silenciosa canción
de amor desesperado.
Hueco perdido entre cubos de basura, hueco sin
nada ni nadie, di
¿dónde suena este aullido?
Noche del desamparo, del desconsuelo, noche de
la soledad, ¿por qué
nos has abandonado?
NOTA: Adolfo Cueto (Madrid, 1969), es autor de Palabras subterráneas (publicado en Renacimiento y del que procede este poema) y tiene en prensa Dragados y construcciones, libro con el que ha obtenido el premio Emilio Alarcos.
Exraordinario y sobrecogedor, no se me ocurren otras palabras José Luís