LA CAMARINA

Menudo giro de estilo querida Victoria, te veo como.... ¿más bucólica...? ¿más naturista...? ¿Mas LINCE...?
VINO Y BESOS

Me has llevado a recordar mi niñez y juventud por "los cabezos" de Mazagón, (así le llamábamos a los montes no urbanizados de la playa), cuando junto con la pandilla subíamos para perdernos por su fina arena y comer la Camarina.

Muy bonito.

Un beso.

Manolo, "sí esto es como el mar, quién conoce alguna esquina"...Pues si, puede ser un giro, o no, no sé, tampoco es que conozca mucho sobre los vaivenes de lo que escribo, solo surge y por qué, es para mi un misterio. Por eso agradezco tanto los comentarios, para que me ayudéis a descifrar lo que fluye en mi interior. Y, te aseguro, que para un lince no tiene que haber nada más apetecible que una camarina llena de sensualidad para calmar su sed.

Zumo de camarina

Ana, si, "los cabezos", yo también tengo esos recuerdos, desde muy joven voy a sus playas, siempre a las que hay que llegar atravesando algún cabezo, precisamente porque está situado en un entorno paradisíaco. Recuerdo cuando íbamos al Parador y era una playa casi desértica y lo que andábamos hasta llegar a Piedras Negras...Desafortunadamente, las construcciones y el turismo están arrasando parte de la zona. Sin embargo, entre los que aún quedan, este al que se le llama "Cuesta Maneli" es precioso y te sugiero que vayas a descubrirlo si todavía no lo conoces. Está situado, como bien dices en Mazagón, carretera hacia Matalascañas, después de "Rompeculos" (Que también es una gozada). Sí te acercas, ya me contarás. Por cierto, tiene buen acceso, por una rampa de madera, a unos quince minutos andando y el coche lo dejas en los aparcamientos vigilados que están en la entrada.

Besos

Gracias por tu explicación de Cuesta Maneli. Ya lo conocía, allí he ido con mis hijos pequeños, alguna que otra vez pues era una playa más desertica que la llamada Mazagón, y sobre todo "la parte de las casas de Bonares".

Un beso.

Pues es un giro de estilo precioso, Victoria, ese momento especial que vives y se te queda dentro, y que florece hecho poesía. No hacía falta más que una camarina. Y tu sensibilidad..

Un besote.

"solo surge y por qué ,es para mi un misterio". Creo que ya somos dos que compartimos ese misterio,ese grito que se escapa por el corazón o por el estómago. A eso yo le llamo magia ,otros le ponen normas y le llaman escribir. Que pena me dan. Abrazos, besos....salud¡¡¡.

Has bañado el poema en musicalidad, se oye y sientes aquella tierra.
Besos.

Ana, precisamente, soy también cliente de la zona de las casas de Bonares. A ver si nos vemos algún día por alli, antes de que lleguen los frios.

Avalón, fue puro impulso, caí sin frenos y no quedó tan mal. Muchas otras veces, me lanzó de igual forma, pero respecto a otros temas y no tardan en tacharme de incorformista y rebelde. El caso es que cada vez me dá más igual de lo que piensen de mí, porque esas personas no merecen ni mi atención.

Etinarcadia, eso es magia y la magia no debe tener norma porque en ese mismo instante deja de ser la fantasia. A mi me dan pena, precisamente, esos a los que yo les doy pena, están tan equivocados...

María, tú sabes mejor que yo que los mejores baños no siempre son de agua. Me fortalece que me hables de la musicalidad del poema.

¿Os he dicho alguna vez que me siento de maravilla entre vosotros?. Pues eso.

JABATO DE DIENTES AFILADOS EN LA SIERRA DICE: SABROSAS TUS CAMARINAS.
BESOS

¡MIEDO ME DAS!

GRACIAS, PACO.

...Entre copas de pinos
...sobre crema de dunas

¡Que bonito tu poema Victoria!
Se me hace un nudo en el estómago, necesito el mar como si lo hubiera tenido siempre y la realidad es que no lo he tenido nunca.

Besos envidiosos :)

Gracias, Mamen, perdona mi tardanza.
Justamente fueron los dos primeros versos que se formaron en mi mente. En realidad creo que llegaron, precisamente, porque fue como ese día en que sales a comer fuera, con buena compañía y todo está a pedir de boca.
Me encantó que te diera envidia, jejeje

Besos con miel.

Sí que existe amor a primera vista, victoria. Sobre todo si hablamos del Coto de Doñana. Besos.

Ya lo creo que existe y sí no, ya estamos nosotras para inventarlo Malena.

Gracias y besos.