Una otitis, un descuartizamiento y muchos amigos
Rakel me llevó brevemente a la romería de los Exconxuraos de Llanera (un poco de tipismo asturiano para no olvidar las raíces) y tanto ella como mis padres me dieron de comer, que ya se sabe que uno se gana el cielo sentando a un pobre a su mesa. Mil gracias, guapos.
Bastante gente en la lectura de Valdediós. Ya conocía y apreciaba a Julio Rodríguez y a Laura Casielles. Teresa Soto, que vive en Estados Unidos y está apartada de la literatura asturiana, fue un descubrimiento. García Martín leyó unos aforismos de ambiente chino para acabar confesando que odia el té y el bambú y demás aditamentos. Ante algunos de mis poemas apostrofó que un caballero puede hacer ciertas cosas pero no contarlas. Es un buen consejo. Se lo transmitiré a todos los caballeros que me encuentre.
Muchos amigos asturianos: Lola Lucio y Juan Benito Argí¼elles, Javier Almuzara, Marcos Tramón (ya sé que lees este blog, un abrazo), Hilario Barrero (que pasa en Gijón su mes anual), Rubén Rodríguez, Javier Villanueva, Alfonso López Alfonso, Carlos Iglesias, Ángel Alonso... Y el placer de estar de nuevo en Valdediós. Recuerdo una cena en la hospedería, hace años, servida por los monjes del Císter, con un vino excelente. Ahora, un obispo prepotente (valga la redundancia) los ha expulsado, y a saber qué será del centro.
Por lo demás, encuentro el color local muy entonado en mi patria, con los periódicos llenos de noticias sobre cierto descuartizamiento que trae a los asturianos medio locos. En una casa de Vallobín vivían una madre con sus dos hijos más varios inquilinos jóvenes. La hija menor apareció en el frigorífico troceada y han detenido a todos los que vivían allí. Además, elementos de incesto, violencia, problemas psíquicos, etc. Los periódicos chorrean baba ante semejante filón y cada día aportan interesantes titulares: "Los asesinos encargaron la noche del crimen 45 euros de escalopines al cabrales" (sic), "El descuartizador se inspiró en la película "Viernes 13" para deshacerse del cuerpo", etc.
Ante tanto casquerío, que me perdonen Pepe Luis y Fini pero mis fragmentos de memorias inéditas son vidas de santos. Ah, un recuerdo para José Muñoz Millanes, fan de este blog. Muy honrado.
Encantado de ser amigo tuyo.
Un abrazo, jefe.