Otra vez huérfanos
Bueno, no tanto. Pero casi. Acabo de dejar a mis padres en su hotel. Se van mañana temprano, tras unos días en Isla. Hacía meses que no nos veíamos y les echaré de menos.
Nos despedimos yendo a un baile. Esto puede sonar como suena. Pero no: era estético, era hermoso. Gente mayor que se lo pasaba bien y encima bailaba bien. He visto en discotecas y bares a gente más joven que yo haciendo unos ridículos horribles que no vi en este caso. Eran elegantes, cada movimiento era el preciso. Ojalá yo supiera bailar y ser elegante.
Hemos ido a Portugal y a la rula de Isla Cristina, hemos comido en muchos sitios, hemos tomado vinos al sol, hemos discutido acervamente de política (ellos son de derechas y yo tampoco)... Y ahora volvemos al trabajo, pero con cierta sensación de cobijo sobrevenido, mezclado con la orfandad. Esto que hay que apurar en seis días, a la trágala, debería ser lo habitual, relajadamente. Pero son mil kilómetros. Y no nos vamos a decir que nos queremos.
Lo decimos de muchas maneras...
Nos despedimos yendo a un baile. Esto puede sonar como suena. Pero no: era estético, era hermoso. Gente mayor que se lo pasaba bien y encima bailaba bien. He visto en discotecas y bares a gente más joven que yo haciendo unos ridículos horribles que no vi en este caso. Eran elegantes, cada movimiento era el preciso. Ojalá yo supiera bailar y ser elegante.
Hemos ido a Portugal y a la rula de Isla Cristina, hemos comido en muchos sitios, hemos tomado vinos al sol, hemos discutido acervamente de política (ellos son de derechas y yo tampoco)... Y ahora volvemos al trabajo, pero con cierta sensación de cobijo sobrevenido, mezclado con la orfandad. Esto que hay que apurar en seis días, a la trágala, debería ser lo habitual, relajadamente. Pero son mil kilómetros. Y no nos vamos a decir que nos queremos.
Lo decimos de muchas maneras...
Hay que cuidar a los padres. Luego te quedas sin ellos (a mí ya me falta él), y lo peor es el recuerdo de tus omisiones.
Hay que decirles que se les quiere. Cada uno a su manera. Y si la de uno es decirlo directamente, adelante: ellos ya lo saben, pero no está de más que lo escuchen (o que lo lean). Si algún día nos llegamos a conocer personalmente, te contaré una historia personal y maravillosa al respecto.
Me ha gustado mucho este post, JL. Emociona.
Un saludo