Usted está aquí: Inicio / José Luis Piquero / Blog / Mi amo

Mi amo

La televisión es sensacionalista y uno nunca sabe hasta qué punto está siendo manipulado. Vamos a dar por hecho que el programa "Palabra de gitano" que emitió el domingo La Cuatro tiene alguna porción de realidad. Ojalá no.


Se supone que el espacio quiere reflejar la vida de la cultura gitana. La primera entrega se tituló "Pureza" y se centraba en la boda de una pareja de jóvenes gitanos. El meollo del asunto residía en la prueba de la virginidad, por la cual una serie de mujeres desvirgan a la muchacha y muestran su sangre en un pañuelo, para regocijo de los invitados. Esa prueba de virginidad, según decían los propios familiares, es una patente de honestidad para ella y para toda su familia, y se airea durante la boda como si fuera un estandarte. Se da por hecho que el novio no llega virgen al matrimonio (la propia novia entendía que eso era lo normal) pero la niña tiene que ser virgen sí o sí, so pena de acarrear el descrédito y el deshonor para todo el clan.


Los participantes en el programa se llenaban la boca hablando del pueblo gitano y de la cultura gitana pero el único rasgo distintivo que supieron aportar para esa distinción era precisamente la prueba del pañuelo, la virginidad de la novia. Repitieron algo así como diez o doce veces -o veinte- que la cultura gitana existía por ese hecho y que se extinguiría sin él.


La abuela de la novia, vestida de negro de los pies a la frente, como una monja, no asistía a los festejos por ser viuda. En dos ocasiones se la vio visitar en el cementerio la tumba de su marido, al que llamaba "amo". Insistió con orgullo en que se viera que le llamaba "amo" y que su marido había sido "su amo", y besaba su estatua. No amor: amo.


Supongo que si digo que esta cultura me parece aberrante pareceré un racista. Quizá no lo parezcan ellos, pese a sus continuas alusiones desdeñosas a los payos. En realidad, este tipo de gitanos integristas son sumamente racistas. Bueno, pues tal vez yo sea racista, pero creo que no. Lamento, en gitanos, en payos o en cualquier otro grupo racial o social, la pervivencia de tales costumbres y de un aplastamiento de la mujer que lleva al punto de que ella misma participe de ese aplastamiento y esas humillaciones y esa cultura de la sujección y del desprecio.


Detrás de la historia de la abuela (que era muy mayor y habrá vivido tiempos inenarrables) adivino una historia de terror, para haber dado lugar a tal grado de sojuzgamiento. Adivino el peso de la época, de las costumbres, de las leyes gitanas extremistas, de la ignorancia, de la incultura, de la pobreza, del silencio... Y lo peor es la alegre aquiescencia de la víctima, que ni en sueños creerá estar pensando y haciendo algo distinto de lo que se esperaba de ella. Qué colores tendrían esas pesadillas...


Me consta que no todos los gitanos son así. Conozco a unos cuantos, convivo con ellos, y son bastante normales y se reirían como yo de esas estupideces. Mi prejuicio no va contra los gitanos. Mi prejuicio (pero no es prejuicio) va contra esos gitanos, contra el Opus Dei, contra los reborn christians, contra los integristas islámicos, contra los mormones, contra los supremacistas blancos americanos, contra todos los perpetuadores de la opresión de la mujer, sean de la raza que sean y del credo que sean. En otros pagos, con parecidas justificaciones, realizan a las niñas la ablación del clítoris. Aquí no se llega a tanto, por fortuna. Pero el concepto, en el fondo, y con todas las distancias, es el mismo: la castración, la domesticación, la perpetuación de un esquema opresivo. Mi amo...


¿Las comunidades gitanas han protestado por el programa? Me alegro infinitamente... si es porque están en desacuerdo con esas prácticas y creencias, no porque el programa las haya mostrado.


archivado en:
sancho delgado
sancho delgado dice:
12/02/2013 10:40

Completamente de acuerdo con todo lo dicho , por el contenido y porque lo has expresado a sabiendas de lo politicamente incorrecto del asunto , yo , por ir mas alla , por ser mas incorrecto todavia , añadiria una pregunta ¿ese "aplastamiento" indudable , sufrido por la mujer gitana , no es equivalente al que sufren los varones payos en los ultimos años , fruto de la subasta de los partidos para conseguir el voto femenino?

manuela
manuela dice:
16/02/2013 01:34

Una entrada magnífica. No vi el programa pero conozco bastante la cultura gitana por mi trabajo. Totalmente en contra del papel que otorgan a a mujer, papel que impide la educación de las niñas además de otras barbaridades. Pero siendo justa y sincera no puedo dejar de mencionar aspectos de su cultura que "nosotros" hemos arrinconado. El cuidado y respeto a sus mayores, la unión como pueblo, la importaancia de a familia como grupo extenso y por qué no decirlo: sus fiestas, su libertad..En fin , que ni ellos son los malos de la película y nosotros los buenos ni todo es blanco o negro.

Jose Luis Piquero
Jose Luis Piquero dice:
16/02/2013 01:43

Lo has dicho muy bien. Nosotros somos cualquier cosa menos los buenos de la película. Tenemos mucho que callar.
Y sí, estoy plenamente de acuerdo. Yo también conozco gitanos y los trato a diario. Y muchos de esos valores que tú mencionas ojalá los conservaramos nosotros. El reportaje (sensacionalista y todo) sacó las partes peores. Los payos las tenemos peores, en algunos aspectos. Ojalá todo eso se supere y no seamos ellos y nosotros, sino nosotros simplemente.

Jose Luis Piquero
Jose Luis Piquero dice:
18/02/2013 00:43

Sancho: no percibo ese aplastamiento que mencionas.

Alguien
Alguien dice:
03/03/2013 04:21

yo , personalmente tampoco , pero eso no me impide conocer casos (bastantes) de hombres que lo padecen , cuesta que lleguen a tus oidos , los medios los silencian , maquillan í² desvirtuan , pero en los pueblos todo se sabe , y las leyes estan ahi.