"PGC de Roquetas, 9 - Tolerencia, 0 ( by Alargaor )

Al fornido y noble delantero visitante, Juan Martínez Galdeano, lo tuvieron que retirar del terreno de juego (el patio de la casa cuartel) completamente muerto en la camilla.
La formación del PGC de Roquetas cuenta entre sus filas con un carnicero hiperleñero de palo y tente tieso, un tal Rivas, apodado "el Teniente" pero también conocido como "el crack" por el sonido que producen sus patadas en los esternones de los contrarios al partírselos en cachos.

Lo curioso e insólito del caso almeria 2 del Teniente Rivas, el Crack, es que antes de cortar por lo sano cualquier internada no se sube las medias, ni rebufa al contacto o escupe al suelo, sino que, con toda la parsimonia del mundo, se pone, antes de perpetrar sus escalofriantes entradas, unos guantes de látex de color verde al modo del Abu Ghraib CF de los magnates de "el nuevo Irak más seguro".



El Comité de Competición español actuó tarde y mal. El presidente del PGC de Roquetas trató de quitar hierro al asunto -nunca mejor dicho- ocultando a la prensa que el crack se prodigó, y por tanto produjo ese sonido en el esternón de la víctima, amén de por el efecto de sus propias botas, por haber utilizado un par de armas no reglamentarias de ese metal conductor e inductor de corrientes eléctricas paralizadoras del brio y demás habilidades innatas de la víctima.
A la jueza árbitro, Estefanía López, tampoco se la ve muy rodada en este deporte de riesgo sumarísimo. El acta del partido hueso lo redactó el propio equipo de casa cuartel, en vez de los forenses bajo la supervisión de ella misma, y ahora resulta que a la fotocopia le faltaba la página siete casi al completo. Lo justificó en plan fashion-ella sonriendo alegando que "en su despacho no hay fax, y que los faxes que tiene que usar de otros juzgados no estan tampoco muy católicos"...
En fin, que un encuentro amistoso acabó en torturas impuras y duras. Y los 9 del equipo de casa cuartel cobrando, eso sí, cautelarmente suspendidos de sus funciones. De vacaciones pagadas, vaya.

A nuestra redacción ha llegado el vídeo del partido hueso.
Curiosamente se ven también algunos toques de balón promocionales del Teniente previos a su fichaje. En él se ve a Rivas pateando a dieciseis detenidos en posiciones fetales, hechos una bola. Pues bién, quince de esos cuerpos, tras sus patadas de punterón, entran por la mismísima escuadra de la puerta principal de la casa cuartel, exactamente por la escuadra que hace la T mayúscula del cartelito "Todo por la patria".
En cuanto al cuerpo del que falta, pues eso, que falta, que debe de estar enterrado en alguna parte, o cubierto de cal viva...
Viva el PGC de Roquetas,¡Viva!, rugía su afición con su enano pistola en mano al término del encuentro. Afortunadamente la inmensa mayoría de Roqueteros y pgceros del cuerpo de bién, abominan hoy de ese crack y se manifiestan en la calle pidiendo justicia.
Besos contra las torturas.