Jean Paul (Raúl Blasco)
httpv://www.youtube.com/watch?v=bMy1XuYw7MY
No sé si es el aire común a Leonard Cohen y si de ahí me vienen las asociaciones, pero sí, este tema tiene mucho de Nacho Vegas. Del Nacho que versiona la "Canción del extranjero" del cantautor canadiense. Es Jean Paul, el nombre de la banda de Raúl Blasco, que el sábado pasado nos presentaba en La Carbonería Y mientras Roma ardía, su primer libro de poemas, diciendo que los artistas a los que más había admirado siempre eran escritores. Probablemente de ahí haya escogido ese nombre para su banda. De Sartre, un grande, uno de los más grandes grandes. Aunque quizás también lo haya escogido también de Belmondo, ese otro Jean Paul que fue protagonista de algunas de las más grandes películas de Godard. El reencuentro se produce con el nombre de la editorial que publica Y mientras Roma ardía: Bandaí parte Editores. Adoro esa película. Amo a Anna Karina, adorablemente perversa e ingenua en Vivir su vida, o en Banda aparte. ¿Anna Karina o Jean Seberg? ¿Sartre o Camus? Siempre que he estado con imbéciles que no sabían nada y les hablaba de Sartre me decían: "No, Sartre no. Sartre era comunista y nunca se arrepintió. En cambio Camus sí. Camus... ¡oh, Albert Camus!" Y se quedaban tan anchos. ¿Por qué hay que elegir? ¿Y qué tiene que ver que me guste Sartre con que también me guste Camus o con que no me guste? Lo que hay que hacer es leer más y decir menos tonterías. Para tópicos ahí está la tele o la prensa. Sobre el origen de Jean Paul, algún amigo me preguntaría "¿y por qué no iba a venir de Rappenau, Jean Paul Rappenau, el director de la versión de Cyrano de Bergerac, en la que Depardieu-Cyrano enamora con sus palabra escrita a una Anne Brochet-Madeleine, que sabía que ya nunca iba a olvidar al autor de esos versos.
Raúl Bernal o Jean Paul toca los teclados que acompañan a José Ignacio Lapido y forma parte de esa otra superbanda que ha vuelto a reconquistar Granada o que hace unos años nos hablaba claro y meridiano: el Grupo de expertos Solynieve. Pero ahora me interesa más esa versión más intimista que es Jean Paul, que nace con vocación minoritaria, como lo prueba el hecho de que edita sus canciones en vinilos. Ahí tengo el vinilo Manqué, esperando a que me compre el plato que perdí, como tantas otras cosas, como todo mi arsenal d"amore, en la última mudanza. En versión digital se pueden escuchar todas sus canciones en su página web. Me gusta su voz que alcanza con facilidad graves más graves aun y sus letras que siempre dicen algo y que pusieron a los chicos de Bandaí parte sobre la pista del poeta que sin duda es. No. Este no va a ser su único libro. No sé si tendrá éxito o si no. Tampoco estoy demasiado seguro de que sea importante, ni siquiera deseable, para un poeta. Pero estoy seguro de que sigue habiendo poemas nuevos y canciones, dos caras de la misma moneda, que ahondan en ese Jonás que pugna por quedarse en el vientre de la ballena. De todas formas, este joven que canta "All you need is love" con los brazos abiertos y que susurra sus canciones (sí, las susurra) para los amantes del cine francés, tiene muchas cosas que decirnos, muchas cosas que contarnos o que cantarnos desde esa orquesta del fin del mundo.
httpv://www.youtube.com/watch?v=KstO5ImiJOU
No sé si es el aire común a Leonard Cohen y si de ahí me vienen las asociaciones, pero sí, este tema tiene mucho de Nacho Vegas. Del Nacho que versiona la "Canción del extranjero" del cantautor canadiense. Es Jean Paul, el nombre de la banda de Raúl Blasco, que el sábado pasado nos presentaba en La Carbonería Y mientras Roma ardía, su primer libro de poemas, diciendo que los artistas a los que más había admirado siempre eran escritores. Probablemente de ahí haya escogido ese nombre para su banda. De Sartre, un grande, uno de los más grandes grandes. Aunque quizás también lo haya escogido también de Belmondo, ese otro Jean Paul que fue protagonista de algunas de las más grandes películas de Godard. El reencuentro se produce con el nombre de la editorial que publica Y mientras Roma ardía: Bandaí parte Editores. Adoro esa película. Amo a Anna Karina, adorablemente perversa e ingenua en Vivir su vida, o en Banda aparte. ¿Anna Karina o Jean Seberg? ¿Sartre o Camus? Siempre que he estado con imbéciles que no sabían nada y les hablaba de Sartre me decían: "No, Sartre no. Sartre era comunista y nunca se arrepintió. En cambio Camus sí. Camus... ¡oh, Albert Camus!" Y se quedaban tan anchos. ¿Por qué hay que elegir? ¿Y qué tiene que ver que me guste Sartre con que también me guste Camus o con que no me guste? Lo que hay que hacer es leer más y decir menos tonterías. Para tópicos ahí está la tele o la prensa. Sobre el origen de Jean Paul, algún amigo me preguntaría "¿y por qué no iba a venir de Rappenau, Jean Paul Rappenau, el director de la versión de Cyrano de Bergerac, en la que Depardieu-Cyrano enamora con sus palabra escrita a una Anne Brochet-Madeleine, que sabía que ya nunca iba a olvidar al autor de esos versos.
Raúl Bernal o Jean Paul toca los teclados que acompañan a José Ignacio Lapido y forma parte de esa otra superbanda que ha vuelto a reconquistar Granada o que hace unos años nos hablaba claro y meridiano: el Grupo de expertos Solynieve. Pero ahora me interesa más esa versión más intimista que es Jean Paul, que nace con vocación minoritaria, como lo prueba el hecho de que edita sus canciones en vinilos. Ahí tengo el vinilo Manqué, esperando a que me compre el plato que perdí, como tantas otras cosas, como todo mi arsenal d"amore, en la última mudanza. En versión digital se pueden escuchar todas sus canciones en su página web. Me gusta su voz que alcanza con facilidad graves más graves aun y sus letras que siempre dicen algo y que pusieron a los chicos de Bandaí parte sobre la pista del poeta que sin duda es. No. Este no va a ser su único libro. No sé si tendrá éxito o si no. Tampoco estoy demasiado seguro de que sea importante, ni siquiera deseable, para un poeta. Pero estoy seguro de que sigue habiendo poemas nuevos y canciones, dos caras de la misma moneda, que ahondan en ese Jonás que pugna por quedarse en el vientre de la ballena. De todas formas, este joven que canta "All you need is love" con los brazos abiertos y que susurra sus canciones (sí, las susurra) para los amantes del cine francés, tiene muchas cosas que decirnos, muchas cosas que contarnos o que cantarnos desde esa orquesta del fin del mundo.
httpv://www.youtube.com/watch?v=KstO5ImiJOU