Últimamente no paro de escuchar el último disco de Pablo Moro,
Pequeños placeres domésticos (Boomerang Discos), una maravilla llena de canciones estupendas, con mucha buena poesía. Porque Pablo, uno de los mejores cantautores actuales, es un poeta. Reflexiones sobre la vida cotidiana, alguna crónica de noches golfas y hedonistas, un homenaje a la gente común (esa "gente valiente / que tiene miedo a morir / y a que se mueran los demás"), una pulla al exhibicionismo victimista y hasta un particular tributo al astronauta Aldrin en una canción que en el fondo habla del valor y de la infinitud.
Tuve además la suerte de verle tocar hace poco en directo con su banda (sólo le había oído en solitario), una experiencia que espero que se repita.
Catorce canciones para pensar y para sentir, un disco que nadie debería perderse.
Es que es un gran-gran disco.
Para cuando tengas tiempo, aquí van un par de recomendaciones: McEnroe 'Tú nunca morirás' y Nacho Umbert & La Compañía 'Ay...', creo que te gustarán (bueno, y si no lo conoces, Fabián 'Adiós tormenta').
;)