A los cleptócratas
Europa entera, el mundo,
se han levantado en almas,
reclamando justicia,
el fin de la violencia
que ejercen los cleptócratas,
la paz y la palabra.
Contra esas almas limpias,
esas manos sin mancha
cargadas de razones
y henchidas de esperanza,
los sucios mamporreros
de la hosca dictadura
que imponen los mercados,
esgrimen la mentira,
la sinrazón, la fuerza,
el odio, las mordazas.
Pero a esta Europa nueva,
la Europa de los Pueblos,
ya no podrán pararla.
Europa entera, el mundo,
se han levantado en almas;
y por mucho que ladren,
gruñan, muerdan los perros,
esta Europa que estuvo
dormida tanto tiempo,
por fin ha despertado
y en pos de su destino
firme y con fe cabalga.
Europa entera, el mundo,
se han levantado en almas;
¡temblad, temblad!, bastardos,
que vuestro tiempo acaba.