se pintó
la noche con la tonalidad de los versos,
con el color de las flores,
coloreámos las palabras con la fragancia del MAR,
con el frescor de sus olas,
con el blanco de su espuma.
pintámos
las sombras con el vivo color de la vida,
con la luz de la noche,
con la risa de los niños.
se dibujó el recuerdo
con el grito ahogado del poeta,
con la sangre del vino,
con el rojo de los apasionados.
dibujámos los versos
con la gracia de las manos ausentes,
con la mirada de la melancolía.
dibujamos el grito de la ausencia
de los desheredados.
gritámos el silencio de lo etéreo
de lo efímero
de lo imperdurable
con el tic tac del tiempo que se para,
con la huella que deja la lluvia en las cicatrices
del dolor,
arrancamos el color del día,
el sol de la noche,
el llorar de las estrellas,
y nos arrojamos al ingrávido MAR
Lástima no haber podido estar físicamente. Porque de corazón sí.
Abrazos.