el paraíso tiene su nombre
ya tienes el azul del cielo entre tus manos,
las formas del viento,
la desnudez del sueño en tu piel,
y al renombrar tu nombre
al darle forma a su sonido
brotas como el fruto del árbol eterno,
como un astro errante
en este universo nuevo.
y al darte nombre
naces como nacen las nubes en el aire,
como nacen las tormentas entre las nubes,
como las mareas nacen del mar.
aún no eres como los hombres,
sino alma que vuela, aire, humo.
eres como el sueño de la noche
que ilumina el alba de los días
como la luna de plata y el oro del sol.
aún la noche es larga, pero los espacios
son amplios para volar, como los pájaros
vuelan dibujando los límites de su reino
sobre los ríos, sobre las rocas, sobre las olas
que baten contra tus pies.
ya brillan el cielo y la tierra entre tus ojos
y tus latidos se baten como las plumas de las aves,
y tu corazón se deshilacha como la luna
entre los árboles.
ya tienes nombre, como la tierra se llama tierra
y el paraíso tiene su nombre.