hay un horizonte
Hay un horizonte grabado en la línea de tu piel, el mundo de las flores y los sauces. Un horizonte que se dibuja con la voz de los árboles. Un horizonte de infinitas cumbres, de mil soles escondidos en el reverso de las nubes, de océanos contenidos en los pétalos de un cerezo. Hay un horizonte al que no alcanzas, que no encuentras en el mapa de tus sueños, del que sólo tienes el aroma de su recuerdo, al que le cantas tus sueños con tu flauta de bambú... Hay horizontes, dibujados en tus ojos, que se te derraman como gotas de lluvia...
