Refinerías
Queridos compañer@s de Extremadura: he oído decir que os intentan instalar una refinería de petróleo en Tierra de Barros y que le habéis declarado la guerra frontalmente. Creo que no contáis con la información suficiente para conocer las ventajas que supone tener cerca una factoría de estas características; la de problemas que podrían resolver en vuestra comarca. Os cuento.
A partir de ahora la zona se convertirá en un paraíso para todo tipo de aves y ellos mismos (los dueños de la fábrica) se encargarán de colocar miradores de pájaros antes de que muten. Gestionarán la conservación de los espacios naturales que la administración haya decidido abandonar. Y llegará el momento incluso, en el que la propia Administración Pública asienta y entre en su propio juego de imagen. Demostrarán que la Universidad de Badajoz funciona gracias a su dinero y a su espíritu de progreso científico. Os darán premios al mejor logotipo de cualquier evento de dudosa justificación y os harán ver que a partir de su asentamiento en vuestra tierra la cultura, la ciencia, la naturaleza y el deporte son valores para los que trabajan.
No tenéis que preocuparos por el benceno, el CO2, los óxidos de nitrógeno y otras partículas sin importancia; ellos os demostrarán que son inocuas y os informarán puntualmente de las mejoras que en sus instalaciones van haciendo cada año. Para disminuir emisiones a la atmósfera que, aunque no hacen daño a nadie, es mejor emitir cada vez menos y contarlo, contarlo mucho y con muchos colores.
Veréis qué cambio en la comarca: más música que nunca y un altísimo índice de ocupación. No habrá cigí¼eña que se resista. Los directivos se irán a vivir a cien kilómetros; no por miedo, sino por estrategia emocional. Dirán.
A partir de ahora la zona se convertirá en un paraíso para todo tipo de aves y ellos mismos (los dueños de la fábrica) se encargarán de colocar miradores de pájaros antes de que muten. Gestionarán la conservación de los espacios naturales que la administración haya decidido abandonar. Y llegará el momento incluso, en el que la propia Administración Pública asienta y entre en su propio juego de imagen. Demostrarán que la Universidad de Badajoz funciona gracias a su dinero y a su espíritu de progreso científico. Os darán premios al mejor logotipo de cualquier evento de dudosa justificación y os harán ver que a partir de su asentamiento en vuestra tierra la cultura, la ciencia, la naturaleza y el deporte son valores para los que trabajan.
No tenéis que preocuparos por el benceno, el CO2, los óxidos de nitrógeno y otras partículas sin importancia; ellos os demostrarán que son inocuas y os informarán puntualmente de las mejoras que en sus instalaciones van haciendo cada año. Para disminuir emisiones a la atmósfera que, aunque no hacen daño a nadie, es mejor emitir cada vez menos y contarlo, contarlo mucho y con muchos colores.
Veréis qué cambio en la comarca: más música que nunca y un altísimo índice de ocupación. No habrá cigí¼eña que se resista. Los directivos se irán a vivir a cien kilómetros; no por miedo, sino por estrategia emocional. Dirán.
