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Reeeeecre

Cacuito es el socio más atípico de Er Reeeeecre. Miembro fundador de la extinta Peña Espinete en la era Luzardo, hoy se sienta en un palco de tribuna a charrar con varios colegómenos de la infancia, come pipas, se pega un lingotazo y... se relaja. Mientras tanto, escucha atónito los insultos al árbitro, los cánticos desafinados, la explosión de venas de cuello. Las palmas. En las contadas fechas en que Er Reeeeecre avanza deportivamente, contempla turulato, desclasado, cómo son la virgen de el rocío, o de la cinta, o cualquier político, los que empujan la pelotita al fondo de las mallas en el minuto veintidós, minuto patito. Y por gracia divina devenimos en ciudad de primera. Desaparecen el polo químico, el paro, la inseguridad ciudadana, la injusticia, la pobreza. Los mosquitos. Aleluya. Enhorabuena, vecino. Ya no le meterán más goles.
rafa leon
rafa leon dice:
07/06/2006 12:44

Contundente, certero, revelador, sin pelos en la lengua. La crítica, no una crítica, que muy pocos quieren pero que todos deberían escuchar y asumir. Para que nos luzca el pelo de otro modo, no como ahora.

Con tu permiso, Marcos, lo suscribo y me arrogo la inmerecida condición de co-autor. O plagiario, me es igual.

¡Enhorabuena!

Un abrazo
Rafa

manuel rubiales
manuel rubiales dice:
07/06/2006 13:13

Este ayuntamiento indescriptible entre el futbol, los altares y los escaños es un ejemplo más de la España profunda, folklorica y bananera. Véase el ejemplo del Betis rindiendo honores al cristo del gran poder, con el efluvio cuasi orgásmico de su presidente a la cabeza, o el del Barcelona ofreciendo títulos a la virgen de turno. A parte, claro está, Zapatero es el delantero de los azulgranas y Rodri el cancerbero del Recre. Es el ejemplo moderno de las Cruzadas de antaño, Dios está con los buenos, los que bajan a segunda deben ser infieles, digo yo, y mientras estos son quemados en la pira por no haberse entregado a la fe cristiana futbolera el apostol Santiago estárá cabalgando con su caballo blanco por los campos de los vencedores, y esto último lo digo en voz muy bajita, no vaya ser que algún alcalde pepero se lo tome en serio. Un abrazote.