CicloLitoral 2009: Etapa 18 (del Cabo de Estaca de Bares al Cabo Ortegal)

Después de tres semanas pedaleando por toda la costa cantábrica y tras recorrer unos 1.100 km de litoral, vimos recompensado nuestro esfuerzo cuando llegamos a Cabo Ortegal, donde se unen las aguas del Mar Cantábrico y el Océano Atlántico. Euskadi, Cantabria, Asturias y parte de Galicia. Decenas de municipios y cientos de paisajes costeros que nunca olvidaremos. Una vez más, por cuarto año consecutivo (más de 4.000 km en total), la Ruta CicloLitoral culminó con éxito su periplo, llegando al punto de destino final en la fecha prevista. Gracias de todo corazón a quienes nos seguisteis, a quienes nos ayudasteis y, muy especialmente, a quienes participasteis en la ruta.



Como casi siempre, nos levantamos relativamente temprano, poco después de que el sol intentara asomarse entre algodonosas nubes que poblaban el cielo por doquier. Tras un frugal desayuno, iniciamos el camino hacia Ortigueira, donde llegamos tras dejar atrás un buen número de hermosas playas (Esteiro, Sarridal o Ribeira Grande, San Antonio de Espasante, A Concha,...) y un sinfín de relucientes espejos naturales, cuyas aguas realzaban notablemente la belleza del entorno.

Con Cariño recordaremos las indicaciones que nos guiaban hacia esa localidad, a partir de la cual iniciamos la última gran ascensión de la ruta, a veces complicada, a veces dura y a veces agotadora. Por fortuna, la cercanía de la meta nos permitía sacar fuerza de donde no la había y, tras una interminable subida, de pronto, al doblar una curva, nos encontramos con la recompensa que tanto habíamos deseado: Cabo Ortegal se mostraba, hermoso, ante nuestros ojos. Su punta rocosa hendiendo las agitadas aguas, al tiempo que los tres aguillóns se alzaban majestuosos sobre las mismas. El faro, blanco y rojo, parecía de juguete.

Fundidos en un abrazo, emocionados por la proeza realizada, con mil cien cuchilladas en nuestras carnes, pensando en las intervenciones que teníamos pendiente, saboreamos con especial deleite el momento. Pronto tendríamos que pasar por quirófano, pero en ese instante acabábamos de culminar la cuarta Ruta CicloLitoral, a pesar de las dolorosas afecciones clínicas con las que la habíamos iniciado.

A Poniente, los acantilados que conducen a la Punta do Limo nos indicaban el camino hacia Vixía de Herbeira y la Ruta CicloLitoral 2010, que, si nada lo impide, nos llevará este verano hasta la Punta dos Picos, municipio de A Guarda, justo en la frontera con Portugal.

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Besos y abrazos,

Manuel