El elogio de la locura
(O del hedor de lo insensible)
Hoy
No dejo un poema
Lo intenté
Sí
Lo intenté
Bien que lo saben las Musas
Aunque se hayan decidido
A tomarse un breve asueto
Tal vez se fueron de putos
-O de hijosputos jodidos-
Sin embargo
No
No me daré por vencido
Y mañana
Lo seguiré procurando
Entre dolor y sonrisas
Entre caricias y golpes
Sobre el cansado telar
De una atípica Penélope
Y entre las fauces ardientes
De la insaciable Quimera
Porque el poema
-Grito ahogado de lo sensible
En el amor o en la lucha-
Como ácida avalancha
Importuna
Molesta
Jode, sí, jode
Hiere y se vuelve rumor
Abrasivo
Atronador
Insoportable para los unos
Y para aquellos que se piensan
Sin serlo ni haberlo sido
Integrantes de los otros
De los nuestros
Para insensibles estultos
Que se pretenden muy anchos
Dulces mártires paganos
Para los burdos prosaicos
Disfrazados de bardo juglaresco
Para los hastiados consentidos
Y metenarices de mierda
Para los cuerdos
De encefalograma plano
Disfrazados de agudeza
Y de fingido delirio
-Tan críticos con la demencia-
Para todos ellos
Y para alguno más
Que no menciono
Para no ensuciar mi boca
-O en este caso, los dedos-
Mañana
Si son proclives las Musas
Como dolor de muelas
O un grano enorme en el culo
O una patada sin pies
En la boca del estómago
Dejaré mi poema
De amor, desamor o de lucha
O del mar y sus mareas
O de una Luna de leves
Poetas sin beneficio
O de cualquier otro asunto
Que germine con la sangre
Me salga del corazón
O de los putos cojones
Sí, señora, sí
PUTOS CO-JO-NES
No se me asuste
Bukowski
El gran Bukowski
Era mucho más soez
Y dicen que estaba más loco
-Aunque he de reconocer
no sin malsana envidia
que era mejor poeta
bastante más mujeriego
y un poquito más borracho-
¡Hay que joderse
con los puñeteros cuerdos!
Hoy
No dejo un poema
Lo intenté
Sí
Lo intenté
Bien que lo saben las Musas
Aunque se hayan decidido
A tomarse un breve asueto
Tal vez se fueron de putos
-O de hijosputos jodidos-
Sin embargo
No
No me daré por vencido
Y mañana
Lo seguiré procurando
Entre dolor y sonrisas
Entre caricias y golpes
Sobre el cansado telar
De una atípica Penélope
Y entre las fauces ardientes
De la insaciable Quimera
Porque el poema
-Grito ahogado de lo sensible
En el amor o en la lucha-
Como ácida avalancha
Importuna
Molesta
Jode, sí, jode
Hiere y se vuelve rumor
Abrasivo
Atronador
Insoportable para los unos
Y para aquellos que se piensan
Sin serlo ni haberlo sido
Integrantes de los otros
De los nuestros
Para insensibles estultos
Que se pretenden muy anchos
Dulces mártires paganos
Para los burdos prosaicos
Disfrazados de bardo juglaresco
Para los hastiados consentidos
Y metenarices de mierda
Para los cuerdos
De encefalograma plano
Disfrazados de agudeza
Y de fingido delirio
-Tan críticos con la demencia-
Para todos ellos
Y para alguno más
Que no menciono
Para no ensuciar mi boca
-O en este caso, los dedos-
Mañana
Si son proclives las Musas
Como dolor de muelas
O un grano enorme en el culo
O una patada sin pies
En la boca del estómago
Dejaré mi poema
De amor, desamor o de lucha
O del mar y sus mareas
O de una Luna de leves
Poetas sin beneficio
O de cualquier otro asunto
Que germine con la sangre
Me salga del corazón
O de los putos cojones
Sí, señora, sí
PUTOS CO-JO-NES
No se me asuste
Bukowski
El gran Bukowski
Era mucho más soez
Y dicen que estaba más loco
-Aunque he de reconocer
no sin malsana envidia
que era mejor poeta
bastante más mujeriego
y un poquito más borracho-
¡Hay que joderse
con los puñeteros cuerdos!
RAFA, RECONOZCO QUE A VECES RELEO TUS COSAS, Y, DESPUÉS DE LEER ESTA AIRADA PROCLAMA, ME ESTABA PREGUNTANDO CÓMO SE ME PUDO ESCAPAR SEMEJANTE JOYA Y NO HABERLA LEÍDO, LECTOR ASÍDUO Y FIEL QUE SOY DE TUS COSAS... EN FIN, LEÍDA QUEDA Y, ADEMÁS, GRITO A LOS CUATRO VIENTOS QUE ES UNA JOYA.
SALUD, COMPAÑERO
PACO HUELVA